Quiero ser la dueña de tú vida!!

Las cosas no me están saliendo como quiero.
Estoy dejando que me afecte  nuevamente lo que una vez prometí que iba a ser parte del pasado. No sé que me está pasando, se están confundiendo mucho las cosas, mi manera de verlas, y por ende, mi reacción frente a ellas. Intento mantener una posición realista ante todo lo que veo, escucho y siento, pero como de costumbre, se me va de las manos. 
Cada vez que intento disfrutar de algo sin preocuparme, terminan surgiendo estas cosas que me dejan mil horas pensando: ¿Por qué? ¿Es lo que yo veo? ¿Es lo que me dicen los demás? ¿Mis amigas tienen razón? ¿Me estoy equivocando otra vez? ¿Hice las cosas mal? ¿Es algo o no es nada? ¿Que está pasando? ¿Así tenía que ser? Y termino confundiéndome yo. 
Y como si con esto no tuviera suficiente, anoche soñé que lo buscaba, lo buscaba porque quería decirle que lo extrañaba. No sé donde estábamos, no sé por qué me mandaba así, pero me acuerdo perfectamente que sentía que lo necesitaba y tenía que decírselo, entonces lo buscaba. Me desperté antes de encontrarlo. Geniales mis sueños, suficiente tengo con pensarlo todo el día como para que mi inconsciente tambien tenga ganas de recordarme lo que siento. 
Estoy con mal humor, estoy bajoneada, no quiero salir de la cama, tengo frío, pensar que tengo que estudiar me deprime todavía más, que sea domingo me deprime tambien (y el hecho de que mañana sea lunes). Lo único que quiero y que me haría feliz en este mismo momento no lo tengo, así que no pienso poner un mínimo de esfuerzo para estar bien, siempre tengo que hacer todo para estar feliz dejando de lado lo que realmente quiero, y me cansé de que sea así.
En conclusión, estoy deprimida por no poder tener lo que más quiero, sería tan feliz y lo valoraría incluso más que a mi vida. Tambien porque las cosas se confunden con más de una persona y no entiendo nada, se confunden las cosas, me confundo yo. Siempre me termino enroscando, una razón más para odiarme y sentirme mal. Y no la sigo, porque sino no termino más. Voy a quedarme esperando que algún milagro (o no tan milagro) me levante el ánimo.